domingo, 5 de julio de 2009

El Ejército de Hombres-Mono


Esta historia parece sacada de una novela de Robert Louis Stevenson (El Extraño Caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde) o de H. G. Wells (La isla del Dr. Moreau), tambien podría pasar por algún capitulo de los Simpson, sin embargo nos damos cuenta que estas cosas no solo pasan en los libros o las caricaturas, también pasan en la realidad y son realmente interesantes, porque nos damos cuenta de como funcionaban las mentes de algunos de los personajes que mayor impacto han tenido en la historia.

Así como Hitler intentó perfeccionar los razgos y la fuerza de la raza aria (que debía conquistar al mundo), Stalin recurrió a la eugenesia para fines similares.

En un articulo publicado en 2005 un psicólogo, Clive Wynne, mencionaba una historia que sucedió en 1926: Un biólogo de la URSS llamado Ilya Ivanov, por encargo de Stalin, había iniciado experimentos para crear un híbrido Hombre-Mono, Stalin buscaba crear un ejercito de Hombres-Mono, que no se detuvieran por el dolor, que no exigieran comida en buen estado, que necesitara poco descanso y que tuviera una fuerza superior, un ejercito invencible.

Ilya Ivanov tenía experiencia haciendo híbridos de diferentes animales (burro-cebra, antílope-cabra, bisonte-vaca y bastante experiencia con híbridos de caballos de carreras), así que con un presupuesto bastante bajo (no tengo la cifra exacta) se embarcó hacia Africa donde inició sus experimentos intentando inseminar a tres chimpances hembras con esperma humano, como es de suponerse esos experimentos no funcionaron (si hubieran funcionado viviríamos como en El Planeta de los Simios). Ivanov fundó un Instituto en Georgia, donde ahora buscaba que la cosa fuera al revés: Fertilizar mujeres con esperma de chimpance.

Buscó la colaboración de una señora Cubana llamada Rosalía Abreu, la cual tenia un criadero de chimpances en La Habana, Ivanov le pidió que le enviara unos chimpances para inseminar a una voluntaria soviética que se conoció como G., se cuenta que el Ku Klux Klan se enteró de esto y persuadió a Rosalía de que no lo hiciera (siendo el KKK y ella cubana ¿como la habrán convencido?), en fin, los experimentos nunca dieron resultado y el buen Ivanov, tuvo que exiliarse en Kazajastán (se dice que Stalin lo corrió de la Unión Soviética, pero no confió en esas fuentes) y al querer regresar a Moscú murió al caer en la plataforma ferroviaria congelada ¬¬

Y bueno, la línea entre Loco y Visionario, es muy, muy delgada, si la idea hubiera funcionado qué mundo sería, pero como no funcionó decimos que el señor estaba loco.

3 comentarios:

  1. :P que interesante... esto no lo sabía.
    Un beso desde este lado de la orilla.

    ResponderEliminar
  2. ora si me quede de a seis.........




    MaRuBa

    ResponderEliminar
  3. chamo ya se te olvidó que tienes un blog?

    Como la espuma de las "chelas" efervescente al principio pero baja rápido XDDD

    A ver si escribes che J.

    Te quiero
    PD: lo grav es que quién te hace el comentario hace rat no pasa por su propio blog :P

    ResponderEliminar