Continuando con la segunda parte de la saga de curiosidades, hoy les vengo a relatar algo que leí recientemente que llamó mi atención. Sigue siendo una leyenda, ya que no puede ser comprobada, pero no deja de ser interesante (esta historia también la pueden contar en las borracheras pseudointelectuales).
Esta historia se la debemos al medico militar Johan Jambor, el cual le confió este secreto a un historiador llamado Franciszek Pawlar. Según lo que cuenta Johan Jambor, en el año de 1916 en la batalla de Somme, en la cual se enfrentaron los ejércitos franco-británicas y alemán, se encontraba auxiliando a los heridos, de entre los cuales había uno que sufría mas que los otros, este soldado le exigía que lo salvara o sino lo iba a denunciar ante el tribunal militar, por lo cual Jambor, lo sacó del campo de batalla y lo llevo a una carpa sanitaria.
Como es de suponer, el soldado herido era Hitler que en ese entonces tenía 27 años, según esto, estaba herido del muslo a causa de una granada y había perdido uno de sus testículos.
Sin embargo cuando Hitler se vuelve el Fürer en Alemania, este secreto fue guardado, ya que era de un gran peligro decir algo que perjudicara la imagen del máximo líder Alemán.
Jambor, muere y 23 años después la transcripción de esta historia cae en manos de Gregor Wawoczny, quien las hace públicas.
“Aunque no existen pruebas externas del testimonio de Jambor, su largo silencio y el insistente y viejo rumor sobre la falta de un testículo de Hitler parecen hacer la tesis más plausible.”
Y se dice que en la segunda guerra mundial, hubo diferentes canciones que se burlaban de esta supuesta falta de un testículo de Hitler, citando de nuevo a la fuente:
"Hitler has only one Ball", (Hitler tiene sólo un testículo) "his mother (¿) cut if off when he was small." (el otro lo cortó su madre cuando él era pequeño).
Ahora yo pienso y concluyo: independientemente de si tenía un testículo o dos, para hacer las cosas que hizo y todo el conflicto que le siguió, se necesitaron un par de bolas bien puestas (¬_¬).
Fuente: BBC Mundo
Esta historia se la debemos al medico militar Johan Jambor, el cual le confió este secreto a un historiador llamado Franciszek Pawlar. Según lo que cuenta Johan Jambor, en el año de 1916 en la batalla de Somme, en la cual se enfrentaron los ejércitos franco-británicas y alemán, se encontraba auxiliando a los heridos, de entre los cuales había uno que sufría mas que los otros, este soldado le exigía que lo salvara o sino lo iba a denunciar ante el tribunal militar, por lo cual Jambor, lo sacó del campo de batalla y lo llevo a una carpa sanitaria.
Como es de suponer, el soldado herido era Hitler que en ese entonces tenía 27 años, según esto, estaba herido del muslo a causa de una granada y había perdido uno de sus testículos.
Sin embargo cuando Hitler se vuelve el Fürer en Alemania, este secreto fue guardado, ya que era de un gran peligro decir algo que perjudicara la imagen del máximo líder Alemán.
Jambor, muere y 23 años después la transcripción de esta historia cae en manos de Gregor Wawoczny, quien las hace públicas.
“Aunque no existen pruebas externas del testimonio de Jambor, su largo silencio y el insistente y viejo rumor sobre la falta de un testículo de Hitler parecen hacer la tesis más plausible.”
Y se dice que en la segunda guerra mundial, hubo diferentes canciones que se burlaban de esta supuesta falta de un testículo de Hitler, citando de nuevo a la fuente:
"Hitler has only one Ball", (Hitler tiene sólo un testículo) "his mother (¿) cut if off when he was small." (el otro lo cortó su madre cuando él era pequeño).
Ahora yo pienso y concluyo: independientemente de si tenía un testículo o dos, para hacer las cosas que hizo y todo el conflicto que le siguió, se necesitaron un par de bolas bien puestas (¬_¬).
Fuente: BBC Mundo
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